Adiós a esa vida sin sentido.

"Cuánto me cuesta reconocer que he fallado? Que me equivoqué, que debo pedir perdón, que debo disculparme y que debo remediar las consecuancias de mis aciones.. Debo aprender a perder, a aceptarlo. Aprender a aprovechar las oportunidades.. de ser feliz. De creer, sin condicion alguna.

Con el corazón en mano y destrozado en mil pedazos que se van desintegrando con el tiempo, con ojos lagrimosos brotando de lo mas profundo de esta perdida alma encerrada por límites materiales. Solo mi almohada sabe cuánto sufro al perderte.
Pero así es la vida, triste y dulce. "Dudas", dijeron por ahí. Y si, eso es lo que llevó a sentirme así.

Derrotado, triste, solo. Existo en este mundo cuando me veo al espejo, porque la dolorosa realidad de mis ojos me hace así creerlo, ya no me siento vivo.. No palpita mas mi corazón, ya no hay risa, ya no hay brillo en mis pupilas. Cuánto duele nadie lo imagina.

Lloro y no veo herida, lloro porque no soporto mas este dolor.. Lloro de impotencia. Perdí mis sueños, mis iluciones.. mis mas grandes anhelos de vida. Siempre quize ser mas fuerte. Pero mi alma se limito al estar encerrada. Solo mi corazon entiende, ya demasiado tarde de mis acciones que este error, me costó la vida. Consciente y ardiente de que en esta vida, nunca tuve nada que perder desde aquel momento, en que vine a la vida."

Autor anónimo.